BERMEOKO ANDRAK: EL ALMA DE UN PUEBLO

Este último 8 de marzo hemos vuelto a celebrar y recordar la importancia de la mujer en nuestra sociedad. Para ello, es imprescindible seguir con esta labor de concienciación sobre todo cuando desde determinados foros, partidos políticos o desde el fascismo blanqueado, se está intentando transmitir un mensaje sobre la mujer que nos retrotrae al mejor NODO. Personalmente, me vienen a la cabeza mil momentos en los que recuerdo siempre lo importante que ha sido y sigue siendo la mujer en mi familia: cuidando de nosotr@s mientras aita estaba en la mar, educándonos, transmitiéndonos la cultura, la lengua o gestionando y administrando la casa, y todo esto en la mayor parte de los casos mientras trabajaban en la fábrica o en alguna salazonera; entonces ¿cuándo dormían? Tenéis testimonios increíbles en el proyecto AHOTSAK, os dejo la narración de Luzia Larrozea eta Julita Munitiz: "Emakumeek ere dirua irabazi behar zuten" o Anita Laurrari: "Arropa garbitzen errekan".

Os recuerdo que una de las principales razones para la creación de la Casa del Niño en 1930, fue la necesidad de asistir a los niñ@s mientras las madres trabajaban en la industria conservera. Las mujeres tenían que trabajar necesariamente fuera del hogar para poder lograr un sueldo complementario al de sus maridos, dada la reducida paga que recibían los tripulantes de los barcos.

Siempre nos vienen a la retina las imágenes históricas y en blanco y negro de las mujeres portando pescado, quitando las anchoas de las redes o reparándolas y cosiéndolas, o limpiando la ropa, pero hay una foto que nos suele pasar desapercibida y es la foto de su reconocimiento. Por ejemplo, con el nombre de algunas de nuestras mujeres en el callejero o espacios públicos del pueblo, ya que a día de hoy solo las santas católicas reciben este privilegio. A bote pronto se me ocurren: Saregiñen kaia, Neskatillen enparantza, o con nombres propios; o el diseñar pequeñas secuencias didácticas para que nuestr@s hij@s sepan que además de los Juan de Acurio, Gonzalo Nardiz, Cosme Ibarluzea, Teodoro Anasagati, José Garavilla o Segundo Ispizua, tenemos también a una importante nómina de mujeres en nuestro pueblo que han trabajado igual o más en pro de nuestro beneficio: Salomé Campos, Fernanda Arzadun, u otras muchas.

Hoy os traigo una píldora relacionada con una de las labores en la casa que tanto aparecen en las fotos en blanco y negro. Me estoy refiriendo a una profesión (y digo muy conscientemente profesión) oculta y no remunerada, la de limpiar la ropa. Sí, permitirme que utilice esta cotidiana labor para poner en valor la importancia histórica que ha tenido la mujer en nuestro pueblo, y como os voy a describir en esta píldora, su movilización e implicación para que Bermeo contase con un lavadero dadas las condiciones lamentables en las que tenía que realizar esta labor.

Un poco de historia

Y es que ahora todo es muy sencillo, metemos la ropa en la lavadora la programamos y voilà, en menos de una hora ya tenemos la ropa limpia! Y si todavía no nos apetece colgarla la volvemos a meter en otro artilugio, la secadora, y en otra hora ya tenemos la ropa sequita, lista para planchar o para guardar, depende... todo depende... Pero cuando no existían estas dos mágicas maquinitas ¿qué hacíamos? ¿a dónde acudían nuestras amumas con sus pesadas ascas llenas de ropa?.

En los años 50 del pasado siglo XX, se introdujeron los primeros motores incorporados a los fregaderos, apareciendo como electrodoméstico independiente en los años 60 y generalizándose inmediatamente su uso, con las ventajas posteriores. Como anterioridad, la limpieza de la ropa blanca se llamaba leisíbie. Se colocaba toda la ropa en un barril y en la boca de éste y sobre un trapo se ponían las cenizas del hogar y hojas de laurel. Sobre éstas se tiraba agua hirviendo. Esta operación se repetía varias veces, quedando toda la ropa de la casa impregnada de laurel. Ahora bien, las mujeres también acudían a los ríos, fregaderos, lavaderos y fuentes para lavar la ropa con agua corriente. 

Primeras fuentes y lavaderos

Las fuentes se utilizaban para la recogida de agua o para limpiar la ropa, y en Bermeo tenemos la suerte de contar con una de las más antiguas de Euskal Herria, datada ya en el siglo XVI: la fuente de Portu Zaharra (Iturribixek). A mediados del s. XVIII tenemos otras fuentes registradas junto al portal de Nuestra Señora de los Remedios, en la salida del camino real para Bilbao o en las peñas de Santa Klara-oste (hiruiturribixek). Algunas de estas fuentes se secaron después de un pequeño terremoto que hubo en la villa en 1829. Los problemas para el suministro de agua potable fueron en aumento, y en las siguientes décadas se instalan diferentes caños con chorros en diferentes zonas del casco urbano: Fuente de Taraska,  Fuente del Udaletxe  Bastarre, Cofradía, Escuela de la Atalaya. Y por fin, en 1880 se construyó el abrevadero y lavadero de Trake (Ibarretak) o en 1899 la fuente y abrevadero de Etxetxubarri, el de Itxibiskar (¿?) y del puente de Galdiz. 

Los principales ríos y los lavaderos

Cuando veáis la red de ríos que desembocan en nuestro querido pueblo, os daréis cuenta que la ubicación de su ampliación hacia la Erribera no fue la mejor idea; y la mejor explicación nos da dio lo ocurrido en las inundaciones de 1983. Si bien el Casco Viejo está protegido, no así su 'ensanche' hacia la Erribera, Adobería o Zubiaur. De esta forma, nos encontramos con siete riachuelos desembocando en la zona de la ribera del puerto, que no es mayor a la de un kilómetro cuadrado: 1) Landabaso o San Martín (que se une al Ametzaga al final de su trayecto), 2) Ametzaga, 3) Etxebarrierreka o Aranondo, 4) Berdantza (éste se une al Etxebarrierreka al final de su trayecto), 5) Artikerreka, 6) Zarraneko erreka o Kutzioko erreka y 7) Lamiaraneko erreka. Os dejo debajo un pequeño esquema, aunque la mejor explicación la tenéis en el libro de Toponimia de Bermeo.

Como os podéis imaginar, la ropa principalmente se limpiaba en los ríos, las fotos que os dejo debajo son muy elocuentes. Hay principalmente dos datos que podemos extraer: la ropa la limpia la mujer y para ello utilizan principalmente los ríos que desembocan en el pueblo. Debajo os señalo los principales lugares:

1) Ametzaga erreka: el riachuelo de San Martín se une con el de Ametzaga y por el lateral del Convento de los Franciscanos llega a la Erribera, desembocando en la Erribera. En el río Ametzaga había dos lugares estratégicos para la limpieza: el primero en Erreten, junto al convento y al edificio de Luzarraga; y un segundo, a la altura de Adobería donde había un lavadero utilizado para limpiar la ropa.

2) Bocana del Artza: los ríos Artikerreka, Aranondo y Ametza se unían en la Erribera y juntos en mismo cauce pasaban por debajo del puente de la Calzada (o puente del Camino Real). Este precioso puente hoy en día está oculto debajo de la rotonda del Artza. La desembocadura era uno de los más utilizados para la limpieza, además había tendederos para colgar la colada junto con las redes. Sin duda, este es el lugar más fotografiado, en el que se ven a las mujeres limpiando la colada

3) Artikerreka: el cauce de este río que transcurre por lo que conocemos como Askatasun Bidea, daba opción a tener diferentes lugares para realizar la colada de la ropa e incluso pequeños tendederos para colgarla.

La construcción del lavadero

Sin duda, uno de los principales problemas que tenía Bermeo era la inexistencia de una red de saneamiento, lavaderos,... por lo que las enfermedades provocadas por la ingestión de agua en malas condiciones eran muy frecuentes, incrementándose notablemente la tasa de mortalidad cuando se producían epidemias. En este sentido y, ya desde comienzos del s. XX, hubo un importante movimiento en el pueblo, por el que se reclamaba la construcción de un lavadero, y que no se tuviese que acudir a la limpieza en los mismos ríos o en la ensenada del Artza, ya que no era el mejor sitio para realizar esta labor. Imaginaros todas las impurezas, restos orgánicos... que arrastraba el agua a su llegada a este lugar. Pues bien, en un precioso documento de 1926 un buen número de mujeres presentan un escrito al ayuntamiento en la que solicitan la construcción de un lavadero. El Ayuntamiento se movió con cierta rapidez y tras la compra de un terreno de Martín de Lejarraga, en el verano de 1929 se inauguró un lavadero con cinco pilas en las cercanías del molino de Ondarre, junto al Convento de los Franciscanos, aprovechando las aguas del río Artike; y con un costo total de 17.076 pesetas. 

Os dejo la lista de mujeres que firmaron el documento de puño y letra (tenéis la foto debajo): Pilar López, Adela Arrugaeta, Beatriz Zabala, Petra Arospide, Antonia Butron, Margarita Larrauri, Juana Bilbao, Margarita Goyenechea, Ramona Unda, Rosario Bilbao, Luisa Bilbao, Inocencia Artetxe, Gregoria Astoreca, Cristina Olascoaga, Teresa Erauzquin, Pilar Goyenechea, Encarnación Bilbao, Balbina Zamesa, Micaela Zabala, Flora Lascain, Alejandra Salornan (¿?), Justa Goyenechea, Sabina Ugalde, Paulina Arrugaeta, Prudencia Luciria, Josefa Monasterio, Juana Ybarlucea, Natalia Ortube, Tomasa Calzada, Rosa de Monasterio, Florencia Laca, Beatriz Laca, Antonia Bilbao, Marian Sodupe, Gregara Egaña, Faustina Olano, Magdalena Madariaga, Maria Legarreta, Sofia Berere, Pese Zubimendi, Braulio Arrospide, Felicia Bojenta, María Comin y Martina Alboniga. Sin duda, un precioso escrito en el que se pone de relieve la preocupación de la mujer por un tema de primer orden, su capacidad de movilización y el conocimiento de la lecto-escritura, al tratarse de sus firmas originales.

Fuente: Todo lo relacionado con los problemas de higiene, enfermedades, etc., tenéis el interesante libro de Ander Delgado, Bermeo en el siglo XX. Política y conflicto en un municipio pesquero vizcaíno (1912-1955). Y el documento en el que se solicita la construcción del lavadero con las firmas originales de estas mujeres, lo tenéis en la caja 1247 del Archivo Municipal.

Tiempo de lectura: 4' 35''

*Si os ha gustado compartir y difundir, y entre todas y todos hacemos más grande nuestro pequeño paraíso. 

Erribera desde Artike

Río Ametzaga a su llegada por Erreten a la Erribera

Tendederos en el río Artike por la Erribera

Coladas en las choperas por el río Artike hacia la Erribera

Trabajados de lavandería en el Artza

Trabajos de lavandería en el Artza.

Portando la colada en el Artza

Trabajos de lavandería en el río Ametzaga (¿Adobería?)

Trabajos de lavandería junto al caserío-molino Utzuene (Artike)

Lavanderas en la desembocadura del río Zarran (Kutzioko erreka)

Fuente de Hiruiturridexek (junto a las escaleras de Santa Clara)

Mujeres posando, al fondo el puente del Camino Real o de la Calzada

Red hidrográfica de Bermeo

Mujeres limpiando la ropa en la fuente hiruiturridxek

Firmas de las mujeres solicitando un lavadero


Lavadero que se construyo junto al molino Ondarre

Blog honetako argitalpen ezagunak

LA PLATAFORMA 'GAVIOTA': UNA BREVE HISTORIA

IZARO FILMS PRESENTA: BERMEO Y LA TORRE WINDSOR

EL TESORO DESCONOCIDO DE MUNDAKA