No
os voy a negar el encanto que tiene nuestro Faro de Matxitxako y lo mucho que
está vinculado a nuestras vidas y a nuestros amores y noches locas. Sus vistas
hacia el Oeste con Akatx y San Juan, o hacia el Este con Izaro, Ogoño y la
línea costera hasta Iparralde. Una maravilla, otra más de nuestro Bermeo; pero
¿sabéis su origen? o ¿os habéis preguntado porqué tenemos dos faros? ¡Dentro
video!
¿DE DÓNDE PROCEDE EL TÉRMINO ‘MATXITXAKO?
Sin
duda, el topónimo más importante y citado de toda la costa vasca es
‘Matxitxako’. Los arrantzales bermeanos y los baserritarras de la zona le
denominaban ‘Matxakú’ y menos ‘Matakú’. Los arrantzales de otros pueblos
pesqueros le denominan igual, ‘Matxako’ los de Mundaka, ‘Matzaku’ los de
Ondarroa, etc. En 1888, Delmas nos dice que en la documentación histórica de
los siglos XIV y XV aparece como ‘Machachaco’; Florián de Ocampo en el siglo
XVI, ‘Machicao’; también en el siglo XVI (1554) aparece como ‘Machaçacu’. Texeira
en 1634 lo describe como ‘Machaçaco’. A partir de los siglos XVII-XVIII aparece
como ‘Machicaco’ en todos los mapas y publicaciones oficiales.
¿QUÉ ORIGEN TIENE EL FARO?
El
nombre de ‘faro’ proviene de una famosa torre que fue construida bajo el reinado
de Ptolomeo II (285-247 a.d. J.C.) en la isla de Pharos para señalar la entrada
al puerto de Alejandría. Centrándonos en nuestro faro, os puedo adelantar que existen pocas
referencias sobre su origen, pero sin duda las primeras descripciones las tendríamos
que relacionar con la figura del atalayero, talayador y señeros, que eran muy
importantes y existían en todos los pueblos de la costa vasca. De esta forma,
puede que antes de la construcción del primer faro en 1852, existiese algún
tipo de torre o torreón de vigilancia, de las que servían a los marineros para
hacer señales, encendiendo fuegos y que en los documentos se describen con el
calificativo de ‘tórrak’. Y este hecho se confirma a través de la primera
referencia ilustrada que tenemos, y que alude a la presencia de una torre en
este mismo lugar. Esta ilustración nos la da un derrotero de 1632 que dibuja el
cabo de Matxitxako con una especie de torre en su parte inferior, y con el nombre
de ‘Maschessac’ (Matxitxako).
EL PRIMER FARO DE MATXITXAKO (Faru Zarra)
De
este faro solo se conserva en pie la torre.
Se inauguró el 21 de agosto de 1852.
El ingeniero encargado de las obras fue Félix Uhagon y el aparejador de las
obras fue Juan Martínez Aparicio y en aquel tiempo costó 132.531 reales el edificio, más 234.796 reales el aparato óptico. La
torre es de piedra sillar procedente de las canteras de Durango. El edificio contiguo a la torre, del que solo se
conserva su forma rectangular en el suelo, disponía de habitaciones y
almacenes. La torre disponía de una preciosa linterna que ya no está, y
alcanzaba la altura de 14 metros, a 79 metros sobre el nivel del mar. La clase
de luz era fija blanca con destellos de 4 en 4 segundos, alcanzando la friolera
de 23 millas, el de mayor alcance en la época. Era atendido por tres torreros y
se mantuvo en activo hasta diciembre de 1909. Entre 1854 y 1863 fue la escuela
de ‘guardafaros’, entonces llamados ‘torreros’. A principios de siglo XX fue
sustituido por el faro nuevo, y desde entonces esta antigua torre se ha venido
aprovechando como estación meteorológica y como sirena en días con niebla. En 2014, el Gobierno Vasco
inauguró en este faro antiguo un observatorio de aves marinas y cetáceos,
caracterizado por el tono azul de la nueva fachada.

EL ACTUAL FARO DE MATXITXAKO (Faru Barridxe)
Este
faro, que se localiza unos 100 metros al Sur del antiguo faro,
fue inaugurado en 1909, en una preciosa ceremonia a la que acudieron todas las autoridades
locales y del territorio histórico.
El proyecto del torreón y linterna fue
redactado por el ingeniero Francisco de Pérez Muñoz y la construcción se
encargó a la empresa Barbier de París por 76.000 francos. Las obras de montaje
del torreón y la linterna fueron dirigidas por el ingeniero Rafael de la Cerda.
Este torreón de 20 metros se localiza en el extremo noroeste, es de mampostería
con una bella cúpula de hierro fundido laminado que aloja la óptica. La torre octogonal
es elegante y su interior extraordinario con una escalera interior de caracol
que da acceso a la óptica de la linterna. Como curiosidad os diré que está
óptica rota/flota sobre una base de 300 kilos de mercurio; además, esta óptica
presenta la apariencia de un destello blanco cada 7 segundos, con un alcance de
35 millas. El foco está colocado a 122 metros sobre el nivel del mar, y su luz
irradia una zona comprendida entre Castro Urdiales y el río Deba. El edificio
fue proyectado por el ingeniero José C. de Ucelay, y las obras fueron
adjudicadas al constructor José de Los Heres por una cantidad de 165.000
pesetas. El edificio tiene planta rectangular, componiéndose de un cuerpo
central de dos pisos y dos laterales de una sola altura. El edificio de 450 m
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de planta, tenía cuatro casas en su interior con capacidad para alojar a los torreros encargados del faro
con sus respectivas familias; además de almacenes, cuartos de servicio y
otra casa para el personal encargado de la inspección. La preciosa fachada
principal se ordena en siete ejes de vanos adintelados, siendo el acceso
principal en arco de medio punto, remarcados por molduras.
El
primer farero/torrero después de su inauguración en 1909 fue TOMÁS BLANCO. Junto
con Tomás, a lo largo del siglo XX ha habido otros fareros que han vivido en
estas instalaciones como: JOSÉ BLANCO (hijo de Tomás), Juan Luis
Abasolo, Anton Barrenetxea o
Alejandro Martínez. Actualmente, y desde 1993 el Faro de Matxitxako esté
en manos de una mujer, CRISTINA GARCÍA, la única mujer farera de Euskal Herria
y la única que ha habido hasta ahora en nuestro Faro Matxitxako.
Como
curiosidad os diré que Bermeo cuenta también con el FARO DE ROSAS (ERROSAPE),
inaugurado en 1912, y que se encuentra emplazado al oeste de la
punta deLamiaran. Esta señal tiene por misión facilitar la recalada al puerto de Bermeo
y balizar la entrada por el dique del rompeolas. Su apariencia es de luz blanca
y roja en grupos de 2 ocultaciones cada 6 segundos con una visibilidad máxima
de 9 millas.
Fuente:
Tenéis un precioso libro publicado por Juan Abasolo. Faro de Matxitxako: Residencia habitual, dónde narra como hijo de
torrero/farero sus recuerdos de infancia y juventud en el faro de Matxitxako.
¡Muy txulo!
*Si
os ha gustado pues ya sabéis a compartir ..., y entre todas y todos difundimos
la historia de nuestro Bermeo.
(Tiempo
de lectura: 4’14’’)