CUANDO LA LEPRA LLEGÓ A BERMEO
No
os asustéis, ya que en la Edad Media era algo muy normal y lógico tener una
leprosería. Generalmente, se ubicaba fuera del recinto amurallado de la
localidad y bajo la advocación de San Lázaro. Bermeo no fue ajeno a esta
realidad. ¿Tenéis tres minutos? Dentro video...
El Hospital de San Lázaro
Desde
un punto de vista histórico, cuando se usa el término ‘hospital’ se emplea para
designar los lugares de recogida y refugio de pobres y peregrinos, más que para
referirse a los centros asistenciales donde se practicaba la asistencia médica.
Posiblemente,
este hospital de San Lázaro por las fechas que manejamos sea el primer hospital
del que se tiene noticia escrita en Bizkaia, ya que el hospital de San Lázaro
de Bermeo aparece citado ya en un privilegio dado en Burgos en 1345 por Juan
Nuñez de Lara por el que “el capitán Arego obtuvo licencia para celebrar misa
en el oratorio que había en el hospital de este nombre”. Las fuentes históricas
no nos señalan el año exacto en el que fue erigido, aunque debemos suponer que
debió de ser anterior a esta fecha. Posiblemente la podríamos situar entre el
primer tercio del siglo XIII, cuando a Bermeo se le concede el título de villa
y primer tercio del siglo XIV, cuando la villa cuenta ya un número importante
de moradores y de actividad comercio-pesquera.
¿Pero dónde estaba este hospital?
El
hospital de San Lázaro debió de estar adosado la ermita de Kurtzio o Santa
Mañe, situada al borde de la calzada que salía hacia Gernika, y que en aquella
época era la principal vía de comunicación de la población. Esta ermita estaba
fuera del casco urbano, y por tanto extramuros, en el fondo de un pequeño golfo
donde desemboca el río Almike o Amezaga, así como el pequeño riachuelo
que procede de Kurtzio y que se denomina Zarreneko
errekie o Kurtzioko errekie. De
esta ermita de Kurtzio ya os haré una ‘píldora’ especial porque sin duda se lo
merece, pero tened en cuenta que la antigüedad de esta ermita está muy bien documentada,
ya que aparece descrita en las Ordenanzas de la Cofradía de Pescadores de 1353.
¿Con qué finalidad se fundó este hospital?
No
disponemos del acta de su fundación por tanto no sabemos a ciencia cierta quién
lo mandó construir ni con que objetivo; pero podríamos plantear dos
posibilidades:
1)
Atendiendo a la importancia que tenía la Cofradía de pescadores, y la
utilización que realizaba del Altar de la Cruz, existente en la ermita de
Kurtzio, puede que mandara fundar este centro asistencial para atender a sus
cofrades (pescadores).
2)
Esta segunda posibilidad me parece más probable, me refiero a la que la Orden
de San Lázaro, como en otros puntos de Europa, hubiera erigido este hospital en
las afueras de la que entonces era la principal villa de Bizkaia, con el fin de
asistir a los vecinos de la villa y a los peregrinos que realizan el Camino de Santiago y que llegaban a la villa por mar.
Por
otra parte, el nombre de San Lázaro nos indica claramente que debieron ser los
leprosos los principales beneficiarios del centro. Tened en cuenta que entre
los historiadores de la medicina se acepta que todas las instituciones
asistenciales medievales colocadas bajo la advocación de San Lázaro y La
Magdalena tenían la condición de leproserías. Todas ellas estaban situadas
fuera de las villas para evitar el contagio del resto de la población. Con la
desaparición de la lepra, desde finales del siglo XVI, estos lazaretos
desaparecen y se destinan a asilos de ‘pobres, huérfanos y expósitos’.
En
definitiva, nuestro hospital de San Lázaro presenta similares características a
las de otros que se fundaron también bajo esa advocación en nuestro pequeño
país: estar extramuros de la villa, cerca de un camino principal, además en
nuestro caso a unos metros de la orilla del mar y disponer de una ermita
colindante, en este caso Kurtzio.
La desaparición del hospital de San Lázaro
Sin
duda, su existencia debió de ser muy irregular con períodos álgidos y de
escasez económica. En cuanto a su desaparición os puedo aportar un dato.
Intentando descubrir documentos medievales de Bermeo en la Biblioteca Nacional
de Madrid, localicé un documento que aludía a una bula papal de Julio II de
1507 en favor de las iglesias y el hospital de Bermeo destruidos por el voraz
incendio del 13 de diciembre de 1504. Por tanto, esta bula nos informa de la
destrucción de este hospital y de la necesidad de ser reparado por su aporte
asistencial principalmente en el hospedaje a los peregrinos que iban hacia Santiago.
Lo
cierto es que en 1553 con la fundación del hospital de Sancti Spiritus, el hospital
de San Lázaro es absorbido con todas sus pertenencias y bienes. En el siglo
XIX, el edificio que fuera hospital, y que estaba anejo a la ermita de Kurtzio,
se encontraba en estado ruinoso por lo que en 1881 se decide repararlo y darlo
en arriendo. Finalmente, en 1972 se derribó este edificio anejo a la ermita,
perdiendo para siempre los últimos vestigios de uno de los hospitales más
antiguos de Bizkaia.
Como
curiosidad, y reafirmando la antigüedad del lugar, os diré que en esta ermita
de Kurtzio se encontraba una estatua que en la actualidad se conserva en el
Arrantzaleen Museoa, y que nuestro Ignacio Arocena la describió con estas
palabras: “(...) una enigmatica estatua
de piedra blanca que representa, según se dice, a algún personaje real o
mitológico de la antigüedad clásica. El personaje representado en esta
enigmatica estatua está descabezado. Viste una túnica larga, de cuidados
pliegues y recoge en el brazo izquierdo el extremo del manto que le cubre. Dos
pequeños canes, cachorrillos de ancha lengua y flacas manos lamen cariñosamente
el cuero de su calzado. Esta estatua, según me han dicho, se encontró, tirada
en el suelo, en la ermita de Cristo (Kurtzio), que está en una plazuela a la
que lleva un ramal que arranca cuesta abajo de la margen derecha de la
carretera de Mundaka. Se la usaba antes, cuando aún tenía cabeza puesta sobre
los hombros, como talismán propiciatorio de una buena pesca, sumergiéndola en
el mar con una soga atada al cuello. Cuando la estatua, por lo que fuese, se
resistía a desempeñar el oficio que le habían asignado, que era el de atraer a
los peces, se le tiraba al suelo y se le castigaba con una buena tunda de palos
y patadas. En realidad, todavía hoy se mira a esa estatua con un poco de
recelo: se piensa, con cierto piadoso temblor, que no representa a un cristiano
bautizado, sino a algún maldito pagano, lleno de herejías y de intenciones
torcidas”. Además, otros historiadores nos aportan más información, datando
esta escultura en el siglo XIV e identificándola con San Lázaro.
Fuente:
Tenéis un artículo de A. Erkoreka en la revista Bermeo (1981); además de lo que
nos cuentan ‘nuestros clásicos’: Zabala, Iradi o Arocena.
*Si
os ha gustado pues ya sabéis a compartir ..., y entre todas y todos difundimos
la historia de nuestro Bermeo.
(Tiempo
de lectura: 3’41’’)
Hospital de San Lázaro junto a la ermita de Kutzio |
Estatua de San Lázaro (Arrantzaleen Museoa) |