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EL CLAUSTRO DE SAN FRANCISCO: OTRA MARAVILLA GÓTICA

Irudia
Todavía recuerdo cuando le acompañaba a ama o a amuma a realizar las compras al mercado (‘plaza’). Fuera, en Taraska estaban todos los puestos itinerantes (ropa, zapatos, pájaros, discos, etc.), y dentro en el convento estaban los puestos permanentes. Flipaba con la mezcla de olores: pescado, carnes, flores, verduras...; pero lo que más me alucinaba era la estructura, las raras columnas o las figuras en relieve que poseían, o cuando afilaban esos largos cuchillos de pescado con los laterales de las columnas de arenisca. Todo era alucinante. Años más tarde tuve la suerte de que Ignacio Arocena me lo explicase. Dentro video... EL ORIGEN El convento de San Francisco es no solo el único convento de época medieval que se conserva en Bizkaia, sino también el más antiguo. El convento fue fundado el 30 de enero de 1357 por los Señores de Bizkaia, el conde Don Tello y Doña Juana de Lara, y dotado de los bienes, tierras, casas y diezmos pertenecientes hasta entonces al monasterio de Santa

SAN JUAN DE GAZTELUGATXE: EL ORIGEN

Irudia
La historia de San Juan de Gaztelugatxe es apasionante y está rodeada de todo lo que os podáis imaginar: luchas, misterio, magia, templarios, religión, etc. Por medio de dos o tres ‘píldoras’ os intentaré transmitir estos 10 siglos de historia de este pequeño peñón, hoy, famoso en el mundo entero y patrimonio de nuestro Bermeo. Y como este mes celebramos la festividad de San Juan, vamos a empezar por el nombre... ¿PORQUÉ SE LLAMA SAN JUAN DE GAZTELUGATXE? Bien, la explicación es sencilla. Por una parte nos encontramos con San Juan y por otra Gaztelugatxe. San Juan hace alusión al santo Juan el Bautista que fue decapitado por orden de Herodes y su cabeza, colocada en una bandeja, entregada a la hija de Herodíades. Herodes temiendo la resurrección del Bautista mandó sepultar por separado el cuerpo y la cabeza. Las ‘crónicas-leyendas’ medievales suponen que la cabeza, después de múltiples vicisitudes, llegó hasta la localidad aquitana de Saint-Jean-d’Angély, cerca de La Rochelle,